En esta semana hemos enseñado el Kung-fu a los alumnos de los tres campamentos, Club de Puerta de Hierro, Club de Golf de la Moraleja y Club de RSHECC. Los niños han presentado mucha pasión al aprender tanto el chino
mandarín como el kung-fu. Durante toda la clase, los alumnos obedecen muy bien lo que les dice el profesor. Les gustó mucho la clase de kung-fu, sobre todo a los chicos. Me acuerdo que hay algunos alumnos que me preguntan de los detalles de practicar esta arte marcial, son muy inteligentes. Me parece que es una forma muy útil para aprender hablar en chino, porque mientras juegan los niños, les resulta más fácil aplicar las palabras aprendidas. Además, esto también puede provocar más interés de hablar en este idioma. Los niños son muy potentes de aprender las cosas nuevas, creo que es una oportunidad valiosa hacerles aprender el chino mandarín en esta etapa de oro de su vida. Para mí, estas actividades con los menores me da una experiencia muy preciosa, porque nos ha dejado un recuerdo feliz y inolvidable.
Dawei Duan